Saturday, February 02, 2008

 

Día escolar por la paz (o algo por el estilo)

Esta semana tuvo lugar otra vez. Se celebró la jornada por la paz en el instituto a la hora del recreo. Antes la cristalera del instituto se vió vestida de dibujos de ramas de olivo y pollos que aspiraban a asemejarse a palomas en cartulinas que rezaban frases grandilocuentes escritas por los alumnos para los cuales no tenían más significado que perder un ratito de clase.

No obstante, algunos, orgullosos de sus murales me apremiaban para admirar su trabajo y leer las frases que habían escrito para tan memorable gesta. Quitando las más tópicas, he seleccionado unas cuantas para compartirlas con vosotros:

1- La paz es la base de la humanidad (Leyendo el periódico no lo tengo tan claro).

2- La paz: sentimiento de alegría, fantasía y libertad (¿fantasía?)

3- Ayer ví una paloma, en ella leía: PAZ. Hoy pensando en ella, gritaba: PAZ (De ser cierto, la gente que estuviera en la calle se habrá quedado bastante confusa con semejante grito, claro que después de ver una paloma que lleva escrito un mensaje como si fuera una valla publicitaria uno se debe quedar algo trastornado)

4- La paz es regalar zapatos a los que lo necesitan (desde un punto de vista metafórico tiene su punto por lo de evitar injusticias sociales y todo eso, desde el literal necesita más explicación)

5-No malgastar agua, reciclar residuos (Este chico, obviamente, se debe haber equivocado de tema, siempre hay uno que no se entera).

La jornada proseguía con la lectura de un manifiesto durante el recreo mientras formaban un símbolo de paz humano para que fuera visto desde el espacio por los ovnis y con el hermoso fín de que aquellos lugares que se encuentren envueltos en conflictos bélicos recapaciten, tiren sus armas a un tiempo y renuncien a enfrentarse de modo violento.
Para finalizar tamaño despliegue de buena voluntad se repartía entre los alumnos un trozo de chocolate con pan que no se si les haría más activos pacifistas pero no cabe duda que las endorfinas que les proporcionara el chocolate les pondrían de mejor humor. (Esto último no me parece mal, tal vez no sea práctico pero todo lo que tenga que ver con compartir comida me parece positivo)

Probablemente pensareis que soy una cínica, criticando de este modo una actividad tan educativa que muestra el camino a los futuros adultos que dirigirán esta sociedad en pocos años. Es posible.
Me temo que a estas alturas mi experiencia profesional me dicta que la buena voluntad si se queda en palabrería es inútil. Es como decir : "Te quiero" sin sentirlo. Son palabras vacias.

Mis chavales entienden paz como la palabra opuesta a guerra. La guerra a su vez es eso que pasa en países muy lejanos, algo que ellos no vivirán nunca y que además es algo incluso atractivo en ojos de algunos cargados de videojuegos sangrientos y películas que enardecen y justifican como lícita cualquier matanza si se hace en el nombre de la causa que caiga en suerte en ese momento.
Mis alumnos no entienden la paz también como ausencia de riñas, pleitos y conflictos de todo tipo. No saben que también es la sensación de vivir sin miedo a que te ocurran cosas terribles (Eso pertenece al grupo de cosas que al desconocer su valor, se extrañan cuando se pierden) .

No estoy exagerando. En general saben que la PAZ es buena. No necesitan que se lo diga nadie. Aún así, hay grupitos (escasos, afortunadamente, pero pertinaces) que consideran válida la violencia como medio para conseguir determinados fines.
Un ejemplo: Algunas alumnas (perfectas alumnas normales no problemáticas en modo alguno) que me hablaban cor orgullo de su mural pacifista eran las mismas que al momento siguiente me contaban sin pudor que el día que se encontraran a Fulanita o Menganita en la calle le iban a partir la cara porque ellas no iban a consentir verse insultadas, atacadas o miradas con sorna u odio en modo alguno. Otros alumnos me cuentan que se dan de mamporros a la primera de cambio con todo lo que suponga una "amenaza" (entiendase por amenaza ser de otro país, raza, otra ideología, preferencias sexuales diferentes, tendencias políticas distintas, equipos de fútbol opuestos, estética diferente, aspecto físico que dista de canones de belleza impuestos, tener gustos musicales que no coinciden, que miren a la novia de uno, ser del pueblo de al lado, etc.)
Trato siempre de hacerles recapacitar a estos alumnos de guantazo fácil sobre tolerancia y cambios de actitud. Normalmente en vano, pero nunca, nunca, NUNCA les río la gracia. Dejar hacer es como legitimizar sus actos. No se puede cerrar los ojos.
Intento razonar con ellos, sin moralinas hago lo posible por hacerles analizar el porqué de lo que hacen y las consecuencias. Que imaginen las razones del "otro", que empaticen.
Si algún día consigo que uno reconsidere sus actos daré todo este tiempo por bien empleado. No aspiro a ser Gandhi pero no creo que me paguen únicamente por enseñar inglés, mi función también es que sean mejores personas.

Balance del día de la paz: Un alumno agarró con fuerza el cuello de una chica a la que causo una contractura

Mi aportación a la jornada de la paz, que también la tuve: Visionado con mis alumnos de 2º de Bachillerato del fantástico documental : Bowling for Columbine de Michael Moore.
Que los estudiantes por ser jovenes no necesariamente son tontos y analizan las cosas si se les da la oportunidad para pensar, agradecen ver que las cosas no son blancas o negras y que les quiten la venda de los ojos de tanta sensiblería para conocer la realidad y decidir sus propios puntos de vista.

¡Madre mía!¡Qué rollo he soltado!


Besitos de paz sincera, seguidos por un trocito de chocolate.



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